Muchos han aprovechado el confinamiento de los últimos meses para retomar o descubrir una afición por la cocina. Han sido semanas de encierro forzoso, en las que los restaurantes han estado cerrados.
La situación ideal para encontrar entre fogones un entretenimiento y un placer añadido al gusto por la buena comida. Hemos pasado mucho tiempo en la cocina y quizá nos hemos dado cuenta de que es indispensable en nuestra vida.
Ahora bien, es probable que muchos hayan descubierto también que la mejor manera de cocinar es disfrutando, y que para eso es muy importante tener una cocina tal y como la queremos.
Una condición absolutamente imprescindible es tener los utensilios adecuados. Sin ellos, todo es más difícil y cocinar puede llegar a su frustrante. También ayuda tener unos muebles a tu gusto. En primer lugar, funcionales, de modo que encuentres rápidamente lo que necesitas.
Pero no solo eso: también conviene que estés cómodo en tu cocina, que disfrutes en ella, y para eso es posible que algunas necesiten una renovación. Si es así, las cocinas negras son una tendencia que sigue plenamente vigente, como nos sugieren desde Cosentino con la colección Eternal Noir y Eternal Marquina de Silestone.
Las cocinas negras llegaron a nuestros hogares hace algunos años, y no han perdido ni un ápice de sus atractivos: son elegantes, tienen personalidad y combinan muy bien con casi todo.
El negro, ideal para combinar con otros colores
Tenemos la idea de que el negro absorbe la luz, con la que da a las estancias un aspecto oscuro. Sin embargo, no tiene por qué ser así. Todo depende cómo lo combines. Los especialistas suelen aconsejar que el negro no se emplee más de la mitad de la estancia. Además, es importante que manejes bien la iluminación. Si dispones de abundante luz natural, mucho mejor.
A partir de esta premisa, puedes crear combinaciones muy sugerentes jugando con los claroscuros y creando efectos de profundidad. Por ejemplo, muchos optan por combinar una encimera negra con mobiliario de otros colores. El resultado suele ser muy elegante en combinación con colores claros. Desde luego, el blanco, pero también el gris perla o un amarillo beige.
Otra opción es apostar por un negro no tan puro. Por ejemplo, que incorpore matices o vetas de otros colores, lo que le dará un efecto moderno y muy sugerente. Hay marcas que permiten este tipo de combinaciones con materiales de alta calidad inspirados en la piedra natural.
Al final, la clave es encontrar el equilibrio. El negro es un color con mucha personalidad, pero también abierto a la combinación. Por eso, otra posibilidad es contraponerlo a materiales como la madera, el metal o granito de tonos claros.
Estilo nórdico con encimera negra
El nórdico es, como las cocinas negras, un estilo que sigue de rabiosa actualidad. Se trata de un estilo capaz de dotar al lugar de una apariencia muy actual. La sobriedad y sencillez que caracterizan a esta tendencia se realza mucho con una encimera en un negro muy intenso, puro.
Hay que tener en cuenta que este tipo de diseños abogan por evitar las estridencias. En este sentido, las superficies puras en un color sólido y acabado mate encajan a la perfección.
En definitiva, las cocinas negras exigen un pequeño esfuerzo para combinarlas. El resultado es elegante, sofisticado y atrevido, y merece la pena.