Cuando hablamos de trabajo, abarca tanto a quienes tienen una relación de dependencia, como de aquellos que tienen un negocio propio. Ambos tienen en común que realizamos una labor diaria a cambio de un ingreso.
Añoramos aumentar nuestros ingresos y de ser posible, lograrlo con el menor esfuerzo posible. Y no hay nada de malo en eso. Dios mismo desea que seamos prosperados en todas las cosas, que tengamos salud así como prospera también nuestra alma.
A continuación te describo 10 consejos para acelerar tus finanzas a través de tu trabajo:
1. Pon en las manos de Dios todos tus proyectos
Si tuviéramos la confianza y el total acceso de poder hablar telefónicamente con un empresario exitoso, ¿acaso no nos tomaríamos un tiempo para llamarle y pedir su opinión sobre el emprendimiento que tenemos en mente, o la mejor forma de realizar una tarea que se nos fue asignada? Si no somos demasiado orgullosos, seguramente lo llamaríamos inmediatamente para pedir su opinión, ya que su consejo nos ampliaría grandemente nuestras posibilidades de éxito.
Para quienes creemos en Dios, ese es el poder de la oración, como lo expresa Salomón en el libro de proverbios: "Pon todo lo que hagas en manos del Señor, y tus planes tendrán éxito."
2. Crece
Si deseas tener mayores recompensas en tu trabajo debes estar en constante crecimiento, lee libros, participa de capacitaciones, asiste a seminarios, mejora tus destrezas, lleva cursos en línea, procura mejorar un poco cada día.
¿Sabes que si como persona mejoras un 10% en una año, en tan sólo 7 años serás un 100% de lo que hoy eres? Crece, se una persona hambrienta de conocimiento, de esta forma verás como te conviertes en una persona más calificada, mejoran tus tomas de decisiones, así como tus aptitudes y destrezas. Semillas indispensables para mejorar también tus ingresos.
Salomón nos aconseja: "Concluí entonces que la sabiduría sobrepasa a la necedad, como sobrepasa la luz a las tinieblas.'"
3. Enfócate en tus talentos
Muchas veces perdemos tiempo tratando de mejorar nuestras debilidades, cuando realmente debemos poner nuestro principal esfuerzo en enfocarnos en nuestros talentos principales.
De forma intencional debemos encontrar la forma de incluir en nuestras actividades diarias aquello para lo cual tenemos una aptitud natural.
Cuanto más nos enfocamos en nuestras fortalezas, mejor haremos nuestro trabajo y mejores resultados podremos obtener.
Cuando nos concentramos en aquello que tenemos habilidad, somos más efectivos y la calidad mejora con un esfuerzo marginal en comparación con nuestras debilidades que toman mucha más energía y con resultados inferiores.
4. Mejora tu actitud
Puedes ser excelente en lo que haces, incluso brillante, pero si tu actitud es de soberbia, arrogancia e incluso indiferencia, tus posibilidades de hacer crecer tus ingresos a través de tu trabajo se verán disminuidos.
Recuerda que toda persona que alcanza grandes objetivos, necesita de más personas que lo ayuden a lograrlo, y muchos de tus aliados serán tan cercanos como tu actitud lo permita. Un cliente, un proveedor, un colega, estarán más dispuestos a apoyarte si tu actitud es positiva y genera valor en tu entorno. Recuerda que la primera persona que se beneficiará de tu buena actitud, eres tu mismo.
Trata a los demás y la vida como quieres que te traten a ti mismo, esa regla de oro hará que tu actitud sea diferente y marque la diferencia en todo aquello que realices. Una persona con buena actitud, nunca pasa desapercibida y las oportunidades tampoco.
5. Se diligente
La diligencia es una gran virtud que exponenciará cualquier actividad que realices, ¿no me crees? Mira lo que dice Salomón al respecto: "¿Has visto a alguien diligente en su trabajo? Se codeará con reyes, y nunca será un Don Nadie." y añade también: "Las manos negligentes llevan a la pobreza; las manos diligentes conducen a la riqueza."
Toda empresa requiere para sus puestos clave personas diligentes, todo emprendimiento para que sea exitoso tiene como base la diligencia.
Quieres conducir hacia la riqueza y codearte con gente importante? Hagamos de la diligencia una de nuestras principales virtudes.
6. Se fiel en lo poco
Todos queremos grandes oportunidades, puestos gerenciales altos, negocios de muchas cifras, de forma natural tenemos tendencia a subestimar el poder de lo poco.
Recuerdo cuando le pregunté a un exitoso empresario cual era su secreto para venderle a clientes grandes y su respuesta fue muy sencilla: no menospreciar al pequeño me contestó, véndele y atiende bien al cliente pequeño, cuando menos sientas, el pequeño te recomendará con un tío, el cual te llevará con su amigo que será el negocio grande, para llegar a los grandes debes ir primero por los pequeños.
Haz bien con lo que se te ha encomendado, se productivo con lo que tienes en tu mano, y demuestra que puedes ser confiado con más.
Jesús lo expresó de esta manera: "Al que cuida bien lo que vale poco, también se le puede confiar lo que vale mucho. Y el que es deshonesto con lo de poco valor, también lo será con lo de mucho valor." No subestimes el poder de lo poco.
7. Descansa
Dios mismo descanso el séptimo día luego de hacer la creación, cuanto más nosotros necesitamos también de recargar las baterías. Me gusta la natación y me gustaría nadar más kilómetros, pero nadando si para lograr mi objetivo decidiera nadar sin parar hasta lograrlo, sólo conseguiría condicionar mi cuerpo a una lesión y tener que dejar el objetivo para mucho después.
Planifica tu descanso y no sólo pienses en los fines de semana o en las noches al regresar a tu casa del trabajo, agenda todos los días al menos un breve descanso de 5 minutos cada dos horas, párate, estírate y haz unas respiraciones profundas. Este hábito le dará energía a tu cuerpo y mente.
Un consejos más, cuando descanses...Disfrútalo! Salomón nos dice al respecto: "Más vale un puño lleno con descanso, que ambos puños llenos con trabajo y aflicción de espíritu."
8. Toma decisiones correctas
Esto requiere las mismas dos características que Dios le ordenó a Josué: decisiones esforzadas y valientes. Muchas veces vamos a llegar a encrucijadas en nuestra vida profesional que requieren de nuestra parte tomar decisiones difíciles, como el decidir no para actividades fraudulentas, vender productos que van contra nuestros principios, mentir o engañar a clientes para lograr las cuotas de ventas, entre otras más.
Decisiones que en su momento no serán fáciles, que requerirán de valor e incluso consecuencias monetarias inmediatas, pero si actuamos esforzada y valientemente, valdrá la pena. Nuestro nombre es el principal activo que tenemos, es nuestra marca y debemos cuidarlo tomando las decisiones correctas.
En el libro de proverbios vemos que: "De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas, Y la buena fama más que la plata y el oro." Tu futuro laboral depende de tu buen nombre.
9. Valora tu TIR (Tasa Interna de Retorno)
El trabajar mucho no es un sinónimo de ser efectivos o conseguir altos resultados. Todos conocemos a muchas personas que trabajan de sol a sol pero sus resultados no son en la misma proporción que su esfuerzo.
Debes detenernos a pensar y determinar donde tenemos el mejor retorno por el esfuerzo que realizamos, donde obtienes más provecho por el tiempo invertido.
En mi opinión, el mejor TIR que existe es este: "El Señor recompensa a los que le temen con riquezas, honra y vida, si son humildes." Te comparto la definición de humildad: "Actitud de la persona que no presume de sus logros, reconoce sus fracasos y debilidades y actúa sin orgullo."
¿Quieres subir tu TIR?, teme a Dios y no olvides ser humilde.
10. Excelencia total
Cuando se trata de hacer un trabajo, la barra es bastante alta ante los ojos de Dios, no es sólo seguir mi descripción de trabajo, el mínimo posible o lo "justo por lo que me pagan". Pablo lo describe claramente: "Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres".
Gran desafío ya que es hacer todo con excelencia aunque no nos vean, ya que lo hacemos para Dios que nos ve en todo momento. Una observación importante, hay una gran diferencia entre hacer algo de manera excelente respecto del perfeccionista.
El primero hace todo su esfuerzo acorde a sus posibilidades y segundo nunca está satisfecho generando estrés para su vida y quienes le rodean. Se la diferencia porque yo confundía ambas definiciones y te recomiendo por tu salud que adoptes sólo la primera.
Haz tu trabajo de forma excelente y no pasarás desapercibido, pronto te darás cuenta que cosecharás lo que has estado sembrando.
Frases célebres acerca del trabajo:
"Yo creo bastante en la suerte. Y he constatado que, cuanto más duro trabajo, más suerte tengo." Thomas Jefferson
"He ofendido a Dios y a la humanidad porque mi trabajo no tuvo la calidad que debía haber tenido." Leonardo Da Vinci
"Sin trabajo nada prospera." Sófocles
"El genio comienza las grandes obras, pero sólo el trabajo las acaba." Petrus Jacobus Joubert
"Lo que con mucho trabajo se adquiere, más se ama." Aristóteles
"El trabajo endulza siempre la vida, pero los dulces no le gustan a todo el mundo." Victor Hugo
"El fin de un trabajo es principio de otro." Séneca
¡Espero que este artículo sea de ayuda y bendición!
Artículo escrito por Cesar Tánchez, reconocido empresario, mercadólogo, autor de libros de desarrollo personal y orador motivacional guatemalteco. Si te gustó, asegúrese de seguir las redes sociales de Cesar Tánchez en Facebook, Twitter, YouTube o ingresa tu correo aquí y recibe periódicamente información que te ayuden a tener una vida abundante y feliz.
