El paraíso en la tierra. Eso es el lujoso resort Amarena, ubicado sobre acantilados en un rincón tranquilo de la República Dominicana.
Es un edén caribeño donde el tiempo se detiene y el estrés se desconoce. Allí puedes disfrutar de los más hermosos paisajes y de las playas más cristalinas que puedas imaginar.
El diseñador Robert Trent es el creador de este resort, que cuenta con una inmejorable vista hacia la majestuosa Playa Grande y está rodeado por 2.000 acres de selva prácticamente virgen y de la espectacular cadena montañosa de la Cordillera Septentrional.
Amarena se encuentra ubicado exactamente en el Playa Grande Golf Course, un coloso campo de Golf donde los millonarios acuden a golpear pelotas para soltar las tensiones del mundo empresarial.
El diseño interior de Amarena es de clase mundial, muy acogedor y ultra lujoso. Los jardines son alucinantes, con flores y rosas de todos colores.
Los afortunados huéspedes tienen la opción de elegir una de las 25 casitas adornadas con artesanía dominicana y materiales naturales de la zona.
Para amenizar una velada inolvidable, los visitantes cuentan con un bar al aire libre, con amplios rincones donde pueden sentarse y relajarse. El resort también tiene una biblioteca y una fábrica de puros.
Amarena Beach Club tiene la ubicación precisa para disfrutar de los hermosos atardeceres de la costa dominicana. Hay muchas áreas abiertas debido a clima caliente de ese país.
En Amarena puedes consentirte como nunca, ya sea acostado sobre una hamaca viendo caer el sol o comiendo a la orilla de la playa con los pies sobre la cálida arena. Es un sitio perfecto para la relajación holística y para aquellos que les gusta conectarse con su ser interior y la naturaleza.
Y no podía faltar el spa. Tiene dos plantas y les ofrece a los huéspedes un santuario de tranquilidad, con ocho salas de tratamiento, una piscina watsu, un gimnasio y una gran variedad de tratamientos holísticos.
Solo debes olvidarte del mundo y entregarte al placer, que Amarena se encarga del resto.