El RAGNAR no es un superyate chárter cualquiera. Su historia es digna de contar y sus características más aún.
La mayoría de los superyates de lujo comienzan y terminan sus vidas al cuidado de una tripulación omnipresente. El mantenimiento y la limpieza nunca son un problema, y el abandono menos. Pero esa no fue la suerte del buque exploratorio RAGNAR, un barco que alguna vez fue maltratado y que se dio por muerto en Kazajstán antes de su remodelación por el astillero holandés ICON Yachts.
El gerente de proyecto de ICON Yachts, Leon de Haas, supo desde el primer momento que la maravilla de 227 pies con el casco de clase Polar mejor calificado del mundo, se convertiría en una opción muy atractiva para viajar a los lugares más distantes del planeta.
Una transformación épica
Durante los siguientes 22 meses, el superyate RAGNAR (anteriormente llamado 'Sanaborg' y construido en 2012) experimentó una transformación dramática, cortesía del diseñador Redman Whiteley Dixon. En el interior, el barco adoptó un notable estilo “medieval”, inspirado en los castillos y las fortalezas de la época.
El nuevo RAGNAR de 77 metros cuenta con un salón de banquetes renovado, un gimnasio y una terraza amplia para brindar alojamiento hasta a 12 viajeros, mientras que se incluyeron un spa, sala de masajes, sala de vapor y jacuzzi en la cubierta superior para días más relajantes en el mar.
Y para finalizar el día, las camas para descansar sobran, ya que el barco cuenta con dos master suites en la cubierta B, cuatro suites dobles en la cubierta principal, una suite doble para el personal y una oficina que también se convierte en otra suite doble.
RAGNAR, el rey de los vikingos
RAGNAR tiene capacidad para explorar el Ártico y los lugares más remotos, además puede operar en temperaturas árticas tan bajas como -35 ° C y mantener una velocidad de cuatro nudos en hielo a más de medio metro grueso. Asimismo, posee un increíble alcance de 6.000 millas náuticas y estabilizadores de velocidad cero para brindar a los huéspedes noches tranquilas.
Los huéspedes necesitarán al menos una semana para experimentar todos sus juguetes, incluido un helicóptero Airbus EC145 para heliesquí y un submarino de tres pasajeros para explorar las profundidades, ambos disponibles a pedido.
Pero no podemos dejar de mencionar el bote auxiliar Ribeye de 400 caballos de fuerza, las cuatro motos de agua Seadoo RXT-X 300, las motos de nieve Lynx Alpine Ranger y el equipo de buceo.
El superyate RAGNAR con helipuerto totalmente certificado y espectacular sala de observación puede alquilarse por aproximadamente $525.000 (443.000 euros) por semana a través del líder mundial en alquiler de yates Burgessyachts.com.