Si bien es cierto que Ibiza es un destino de ocio muy relacionado con la vida nocturna y con actividades en las que participa gran cantidad de gente, también lo es que en esta isla es posible disfrutar de un tipo de turismo muy diferente; uno más tranquilo y que también resulta de lo más placentero.
¿Te gustaría saber cómo disfrutar de la Ibiza más sosegada y sacarle el máximo provecho? En ese caso no dudes en seguir los consejos que te damos a continuación.
1. Conoce Ibiza también en temporada media-baja
Es de sobra sabido que Ibiza está repleta de personas llegadas de todas partes en temporada alta. En el mes de agosto da la impresión de que ya no cabe más gente.
No obstante, visitarla en temporada media y casi baja es una opción realmente atractiva también, ya que permite disfrutar de sus espectaculares atardeceres y sus increíbles calas, pero con muchas menos personas alrededor.
Meses como mayo y octubre son un momento ideal para contratar un alquiler barco Ibiza y disfrutar de las aguas cristalinas de esta isla lo más cerca posible. Sin duda, esta es una experiencia especialmente apetecible para personas que buscan una experiencia apasionante pero calmada.
2. Busca fuera de lo más conocido
Dar con la versión más tranquila de Ibiza también es cuestión de hacer un pequeño esfuerzo y salirse de la ruta trazada. En caso de que vayas a pasar unos días en la isla deberías alquilar un coche, ya que el servicio de transporte público tan solo cubre las rutas más básicas y típicas, pero no te dejará explorar por tu cuenta.
Razón por la cual es tan importante hacerse con un coche al mismo tiempo que se compra el billete de avión. Recurriendo a un comparador puedes conseguir precios realmente excelentes.
3. Huye de los sitios más famosos en determinados momentos
Hay algunos lugares fantásticos en Ibiza, pero que no son recomendables en ciertas horas o fechas si lo que buscas es evitar las aglomeraciones de gente.
Entre estos encontramos por ejemplo el mercado de las Dalias en pleno mes de agosto, el Café del Mar justo cuando cae el sol, o la plaza de Santa Gertrudis a las 10 de la noche.
Estos son verdaderos clásicos de la isla, pero si lo que buscas es un poco de paz y relax, sin duda no son opciones para ti.
4. Busca siempre “el otro lado”
En prácticamente todos los puntos (incluidas las calas) de Ibiza existe algún sendero hacia la derecha o hacia la izquierda que te permite alejarte de las grandes masas de gente.
Quizás Cala Salada y Cala Saladeta se encuentren totalmente colapsadas, pero si te vas justo a la izquierda del acceso a estas playas puedes encontrar una carretera que va hacia Punta Galera, que es una antigua mina que a día de hoy conforma un paisaje sin igual.
Este es tan solo un ejemplo de lo que te puedes encontrar en Ibiza si decides variar un poco