Jacob Fugger -conocido como Jakob Fugger el Rico- fue un banquero alemán que financió reyes, exploradores, obispos y papas para acumular la mayor fortuna en la historia.
Era nieto de un campesino y persuadió a Leo X para legalizar los préstamos con fines de lucro. Uno de sus proyectos para hacer dinero provocó que Martin Luther escribiera Las 95 Tesis y comenzara la Reforma.
Nació en el seno de la familia de comerciantes Fugger de Augsburgo, que en pocos años llegaría a ser una de las primeras empresas del capitalismo temprano. Su habilidoso aprovechamiento de los recursos naturales consiguieron para su empresa el monopolio del mercado del cobre en Europa y plantaron los cimientos del reconocimiento internacional y la riqueza de la empresa familiar Fugger.
Fugger y su dinero le dieron el voto a Carlos V de España y lo colocaron en la cima de un imperio tan grande como el de Napoléon. Subvencionó guerras y elecciones de reyes, asegurando así a sus negocios un rápido crecimiento y ejerciendo mediante la financiación un influjo político considerable.
Su patrimonio neto era de alrededor de $400 mil millones en dólares actuales en el momento de su muerte en 1525, o el 2% de PIB en ese momento.
A continuación, las 7 lecciones de dinero por Jacob Fugger:
1. Invertir cuando otros temen
Fugger hizo dos apuestas que aseguraron su fortuna. La primera fue financiar al archiduque Sigmund de Tirol cuando parecía que Venecia iba a tomar el ducado.
Los banqueros habituales de los duques se negaron a financiarlo, por lo que Jacob Fugger se adelantó y ofreció todo lo que él, sus amigos y su familia pudieron reunir. El duque se instaló en Venecia y a cambio de su respaldo, Fugger cerró la concesión de la mina de plata más grande del mundo.
Fugger también invirtió en minas de cobre húngaras cuando otros temían una invasión turca. Y aunque los turcos finalmente llegaron, esto ocurrió después de la muerte de Fugger.
2. Ser indispensable
Jacob Fugger utilizó su fama para aislarse de monarcas que podían haber incumplido sus préstamos.
Fugger tenía algo que sabía que sus prestatarios necesitaban para vivir: la capacidad de obtener grandes sumas de dinero en un instante. A los prestatarios no les gustaban ni Fugger ni sus términos, pero no podían vivir sin él.
3. Conocer los hechos
Fugger entendió el valor de la buena información. Creó el primer servicio de noticias del mundo y lo utilizó para descubrir los movimientos del mercado antes que otros.
El emperador Maximiliano (el abuelo de Carlos V) le dijo una vez al banquero que Enrique VII le había enviado algo de oro como garantía de un préstamo para luchar contra los franceses.
Fugger rechazó el trato porque sus espías en Inglaterra le dijeron que los barcos nunca salieron del puerto.
4. Saber de números
Los italianos inventaron la contabilidad de doble entrada. Jacob Fugger fue uno de los primeros en el norte de los Alpes en usarla.
También fue el primero en enviar auditores al campo para verificar las actividades de la sucursal. Sus libros mayores muestran garabatos con sus propias manos para saber el origen de gastos específicos.
5. Recibir buena educación
Fugger pasó varios años como aprendiz en Venecia, la capital comercial de su época. Ganó conocimiento, experiencia y contactos que le sirvieron para el resto de su vida.
6. Mantener la calma
Un obispo austriaco fue uno de los mayores depositantes de su banco. Cuando el obispo murió en 1509, el Papa exigió que Fugger pagara inmediatamente el dinero a la iglesia.
El dinero de Fugger estaba atado en los proyectos mineros y carecía de liquidez para satisfacer la demanda. La retirada, o incluso los rumores de la retirada, lo habrían arruinado.
En lugar de rendirse, Fugger gastó todo para hacer parecer que no tenía liquidez. Esto le dio tiempo para negociar en silencio el trato que lo salvó.
7. Dar algo a cambio
Fugger es mejor conocido como el creador de Fuggerei, el primer proyecto de vivienda asequible del mundo. Su filosofía se basaba en que cualquiera que trabajara merecía tener un techo donde dormir.
El Fuggerei sigue en funcionamiento y es la mayor atracción turística en su ciudad natal de Augsburgo.
Artículo original en inglés publicado en MarketWatch. Síguelos en Facebook, Twitter.