Es bueno ser la princesita de papi. Especialmente cuando papi ocupó el cargo de presidente, entre 1979 y 2017, de uno de los países más ricos de África. Es el caso de Isabel dos Santos, hija del ex presidente de la República de Angola José Eduardo dos Santos, y la primera mujer multimillonaria de África.
Se supone que Isabel ha hecho su descomunal fortuna como “emprendedora” e “inversora”, pero la verdad es que todo se lo debe a los años de la dictadura de su papá, que durante 35 años saqueó los recursos naturales más valiosos del país, el petróleo y la industria de diamantes. Todo para su beneficio personal y de su familia.
La revista Forbes le calcula una fortuna personal de $2,2 mil millones (€1,98 mil millones), convirtiéndola en la mujer más rica de todo el continente africano y la más poderosa y rica en Angola.
Según la revista estadounidense especializada en negocios y finanzas, "Isabel Dos Santos adquirió su riqueza mediante la toma de participaciones en empresas que operan en Angola, lo que sugiere que su riqueza proviene casi en su totalidad de las redes y conexiones de su poderosa familia."
En junio de 2016, su padre la puso como jefe principal de Sonangol, la empresa petrolera estatal de Angola, pero en noviembre de 2017, el nuevo presidente del país la retiró de ese cargo.
Isabel, de 46 años, tiene acciones en bancos, compañías de telecomunicaciones y en la industria de diamantes. Ella se crio en la familia más poderosa de su país y solo ha tenido que dar rienda suelta a su desmedida ambición.
Una infancia privilegiada
Isabel dos Santos nació el 1 de abril de 1973 en Bakú, Azerbaiyán. Su padre fue electo como presidente de Angola el 21 de septiembre de 1979, así que Isabel se crio en el Palacio Presidencial. Luego se mudaría junto a su madre a Londres, donde obtuvo una licenciatura en Ingeniería. En 1992 la chica volvería a Angola para establecer varias compañías con la ayuda de su padre.
El gobierno de dos Santos fue una escandalosa cleptocracia, que no le permitió a su población disfrutar del crecimiento económico que había experimentado el país en la última década de su mandato. El propio gobierno admitió que el 10% de la población no lograba hacer las tres comidas al día. Las riquezas de la nación fueron secuestradas por el presidente y su familia, incluida Isabel.
Varios defensores de Isabel aseguran que es una “brillante inversora”, pero esas afirmaciones se cayeron cuando se supo que su papá transfirió a su hija valiosos activos del país.
Dueña de las telecomunicaciones
En 1990 las telecomunicaciones estaban transformando a Angola. Por eso en 1999 el presidente dos Santos emitió un decreto para que todas las compañías de telecomunicaciones se sujetaran a una empresa gubernamental llamada Unitel ¿Adivinen a quién se le otorgó una participación importante de Unitel? Sí, a la princesa de papi, Isabel. Exactamente posee el 25% de esa compañía. En el 2012 los ingresos de Unitel fueron de $2 mil millones y es la mayor compañía privada del país.
Con el respaldo de su padre, Isabel continuó diversificando sus intereses comerciales en Angola y también en el exterior.
Posee el 25% del Banco Internacional de Crédito, en una asociación entre la familia dos Santos y el multimillonario portugués Americo Amorim.
La reina de los diamantes
Dicen que los diamantes son los mejores amigos de una chica. Para Isabel, sin duda lo son.
En 1999 José dos Santos creó una sociedad de venta de diamantes para aprovechar los enormes recursos naturales del país. Angola es el cuarto productor de diamantes del mundo. Para poner en marcha a la empresa Ascorp, el presidente se asoció con traficantes de armas quienes recibieron el 24,5% de la empresa, mientras que el gobierno se quedó con el 51%.
Isabel tenía una importante participación en la empresa, pero a mediados del año 2000 le transfirió sus acciones a su madre cuando la industria de los “diamantes de sangre” llamó la atención internacional.
Una parte importante de la riqueza de Isabel proviene del petróleo, el mayor activo natural de Angola. La empresa estatal Sonangol es extremadamente rentable y se dice que Isabel tiene una gran participación. Las acciones de la hija del presidente valen $1.000 millones.
A través de la relación de negocios con Amorim, Isabel también tiene parte en varias compañías de Portugal, como la petrolera GALP y la empresa de televisión por cable llamada ZON Media.
Rodeada de celebridades
A Isabel le gusta la música pop, como a muchas mujeres. La gran ventaja que tiene la hija del ex dictador es que puede pagar millones por shows privados a celebridades de talla mundial, como la rapera Nicki Minaj.
En diciembre del 2015 se creó una enorme controversia por un concierto privado que realizó Nicki en Angola, en la sede de la compañía de telecomunicaciones que Isabel dirige, y por él que recibió un pago de $2 millones de dólares.
De hecho Isabel y Nicki se tomaron una foto juntas, que la artista subió a su cuenta de Instagram expresando admiración por la hija del ex presidente, a la que considera una motivación. Sin duda Nicki no conocía sobre la brutal represión a la que estuvo sometido el pueblo de Angola por parte de la familia Dos Santos.
Pero Nicki no ha sido la única artista que se ha beneficiado del dinero de los Dos Santos. En el 2013 Mariah Carey cobró $1 millón por un concierto en Angola, que supuestamente serviría para recaudar fondos para la Cruz Roja. Al final solo se lograron recolectar $65.000.
Derroche en el Mundial de Brasil
El Mundial de Fútbol es el evento deportivo más seguido del planeta. Convoca a celebridades y personalidades del mundo entero, incluida la “princesa” Isabel.
En el Mundial de Brasil 2014 varios diarios reportaron que la hija del ex mandatario africano había viajado al país suramericano con un comité de 600 personas con todos los gastos pagos.
Fue fotografiada en el estadio de Sao Paulo durante la ceremonia de inauguración. Varios de sus invitados fueron celebridades y empresarios de Angola.
Boda multimillonaria
Mientras vivía en Londres Isabel conoció a Sindika Dokolo, quien se dedica a coleccionar obras de arte siendo hijo de un multimillonario de la República del Congo. Isabel y Sindika se casaron en el 2013 en una boda estrambótica.
La fiesta costó millones de dólares y contó con un millar de invitados. Ha sido la boda más lujosa que se ha celebrado en Angola. Muchos de los invitados fueron llevados al país africano en jets privados e ingresaron sin visado.
Dinero manchado
En caso de que Isabel Dos Santos hubiese realmente forjado su fortuna sobre el trabajo honesto, sería un verdadero ejemplo para las mujeres del mundo. Pero su dinero está manchado con la sangre de los angoleños. La Fundación de los Derechos Humanos comenta que José dos Santos “fue uno de los principales violadores de derechos humanos en África, además de un tirano corrupto”.
Desde que asumió la presidencia en 1979, ejecutó a miles de personas, entre rivales políticos, periodistas y activistas. Amasó su enorme fortuna debido al control que mantuvo sobre todos los poderes públicos y las industrias del país.
Nadie sabe exactamente la cantidad de dinero que posee el ex mandatario de Angola, pero se cree que tiene miles de millones de dólares en cuentas de bancos extranjeros.
Aunque hoy en día es la mujer más rica de África, y BBC la nombró "una de las 100 mujeres más influyentes del mundo", Isabel dos Santos no ganó toda su riqueza con esfuerzo propio.
Lo que ocurrió en Angola durante el mandato de su padre, fue uno de los ejemplos más claros de atroz nepotismo, cleptocracia y saqueo que ejercen los dictadores del mundo. Algo similar ha ocurrido en Venezuela y Cuba, con los gobiernos de Hugo Chávez y Fidel Castro, respectivamente.
Esperamos que con el nuevo presidente, João Lourenço, el pueblo angoleño pueda finalmente disfrutar de los beneficios de sus riquezas naturales y de lo que por derecho le pertenece.
Con información del sitio Forbes. Fundada en 1917, Forbes es una revista especializada en el mundo de los negocios y las finanzas. También publica artículos originales sobre temas de tecnología, comunicaciones, ciencia, política, industria, inversiones y marketing. Su publicación principal, la revista Forbes, se publica cada dos semanas. Mantente al día con las últimas noticias de Forbes a través Facebook, Twitter o YouTube.