Cada día, los estadounidenses gastan alrededor de $1,5 mil millones (€1.330 millones) solamente en la web.
Pero esa cifra se ha duplicado cada ves más en los últimos cinco años, según un informe de Departamento de Comercio de los Estados Unidos, y es probable que lo siga haciendo durante las próximas décadas, ya que Internet continúa a la caza del comercio minorista tradicional.
Durante años, el crecimiento explosivo del comercio electrónico ha superado a la tecnología subyacente; las empresas han tenido que acudir a bancos, procesadores de pagos y “Pasarelas” para manejar los pagos.
Esto toma tiempo y, por supuesto, honorarios tras honorarios. Y por si fuera poco, la mayoría de los software que procesan las transacciones tienen décadas de antigüedad, y los más modernos han sido creados por bancos, compañías de tarjetas de crédito o intermediarios financieros que ahora mismo no se preocupan por actualizar sus plataformas.
En 2010, Patrick y John Collison, dos hermanos de origen irlandés, comenzaron a depurar este proceso.
Su empresa, Stripe Inc., creo un software que permite a individuos y negocios recibir de forma instantánea pagos por internet. Proporciona la infraestructura técnica, de prevención de fraude y bancaria necesaria para operar sistemas de pago en línea.
El producto fue un éxito con las empresas de Sillicon Valley, como por ejemplo Lyft, Facebook, DoorDash y otras miles que convirtieron a Stripe en la columna vertebral financiera de sus operaciones.
La compañía maneja ahora decenas de miles de millones de dólares en transacciones de Internet durante todo el año y genera dinero a través del cobro de una pequeña tarifa. La mitad de los estadounidenses que compraron algo en línea en el último año, lo hicieron probablemente sin saberlo a través de Stripe.
Esto le ha dio en 2016 una valoración de $9 mil millones (7,9 mil millones de euros) -cuando recaudó 150 millones de dólares en una ronda de financiacion- varias veces más que la de su competidor más cercano.
Esta valoración hizo que tanto Patrick, de 30 años, como Jhon, de 28, se conviertan en dos de los multimillonarios más jóvenes del mundo, con al menos $1.100 millones cada uno, después de la inversión por parte de CapitalG y General Catalyst Partners.
En la siguiente ronda de financiación, en septiembre de 2018, Stripe recibió una valoración de 20 mil millones (€17.745 millones) cuando recaudó una inversión de $245 millones de dólares, convirtiéndolos esta ves en los multimillonarios self-made, fundadores de una Startup, más joven del mundo.
De hecho, Stripe ya se ha asociado con Amazon.com, el cliente más grande y más buscado en Internet, y durante las dos últimas semanas, la compañía ha comenzado a manejar una gran parte, aunque no revelada, de las transacciones del gigante del comercio electrónico.
Siete años después de su creación, la misión de Stripe está lejos de ser enviar libros, aspiradoras y kits de reparación por todo el mundo. Según Patrick, el objetivo es “aumentar el PIB de Internet”.
Para lograrlo, la compañía está comenzando a ir más allá de los pagos a través de la creación de un software que ayude a las empresas en la incorporación y pago de los trabajadores, así como también en la detección del fraude.
Los hermanos Collison
Patrick y John nacieron en Limerick pero cuando eran niños se mudaron a Dromineer, una aldea idílica en el centro de Irlanda. Sus padres tenían antecedentes científicos (Deny, el padre, en ingeniería eléctrica y Lily, la madre, en microbiología) aunque después se convirtieron en empresarios.
Los dos fueron a una escuela con menos de 20 niños por aula. Cuando se aburría en clase, Patrick leía libros: “Yo alineaba los ángulos de manera que el profesor no podía verme mientras leía”, explica y agrega que años más tarde descubrió que un director había instruido a los maestros para que lo permitieran.
Patrick pasó su último año estudiando en casa para poder hacer los exámenes estandarizados requeridos temprano y graduarse a los 16. Así fue como condensó lo que normalmente era un proceso de dos años de pruebas en un periodo de 20 días en el que presentó 30 exámenes.
En 2006 Patrick se matriculó en el MIT y Jhon lo siguió en su mudanza a los Estados Unidos, estudiando en Harvard un par de años después.
En su tiempo libre, desarrollaban aplicaciones para iPhone. Uno de sus primeros éxitos fue una versión de Wikipedia de $8 en la que las personas podían hacer búsquedas sin estar conectadas a internet.
También ayudaron a crear una manera de manejar las subastas de eBay y vendieron esa compañía, Auctomatic Inc., por $5 millones (4,4 millones de euros) en 2008.
Así fue cómo los hermanos Collison abandonaron la universidad y a finales de 2009 comenzaron a trabajar en las ideas de lo que después se convertiría en Stripe. Su oficina fue instalada en Palo Alto y finalmente Stripe hizo su debut en 2011, con Patrick como director ejecutivo y John como presidente.
Los Collisons habían pasado dos años probando su servicio y estableciendo relaciones con los bancos, compañías de tarjetas de crédito y reguladores para que los clientes no tuvieran que hacerlo.
Con Stripe, todo lo que debían hacer era añadir un "código de siete líneas" al sitio web para que la compañía comenzara a manejar los pagos.
Inicios de Stripe
Aunque las Startups apreciaron lo que Stripe estaba haciendo, la mayoría de los inversores potenciales no lo hicieron. ¿Cómo un pequeño grupo de jóvenes ingenieros podían ser capaces de alterar la estructura financiera de Internet?, ¿No habían oído hablar de PayPal?
Irónicamente, fueron los fundadores de PayPal quienes decidieron apostar por Stripe, al comprender que su tecnología no había mantenido el ritmo.
Hoy en día, Stripe es el motor financiero de más de 100.000 empresas. Almacena información financiera clave, como números de tarjetas de crédito, trata con fraudes y añade soporte para nuevos servicios como Apple Pay. Todo esto por una comisión de 2,9% sobre los pagos.
Aunque la compañía no revela el número de transacciones que procesa, los analistas estimas que se acercan a los $50 mil millones (44 millones de euros) anuales, lo que se traduciría en alrededor de $1,5 mil millones en ingresos.
El beneficio de Stripe es lo que queda después de que los bancos les cobran los honorarios por sus servicios. En general, los bancos pueden tomar hasta un 2,5%, pero Patrick insiste en que Stripe tiene mejores márgenes de lo que la gente cree.
Los principales competidores de Stripe son Braintree Payment Solutions LLC, una filial de Paypal, y la compañía holandesa Adyen B.V. Mientras tanto, Square Inc., se ha centrado en el procesamiento de ventas de minoristas y Google y Apple se han enfocado en los teléfonos inteligentes.
Stripe en la actualidad
En 2016, la compañía mudó sus oficinas al lado del AT&T Park, en el distrito de SoMa, donde se iniciaron las operaciones. El inquilino anterior, la compañía de intercambio de archivos Dropbox Inc., había agregado espacios como un bar, un estudio de grabación de música o una sala Lego, pero los Collison se libraron de todo eso.
En un día de primavera, se puede escuchar música pop en el vestíbulo de orquídeas blancas. Los trabajadores cambian de escritorio cada pocos meses para conocer gente nueva. Un algoritmo selecciona a un compañero para almorzar y los baños tienen un letrero que dice:
“Creemos que el género no es binario. Por favor, usa el baño que sea más cómodo para ti”.
El escritorio de Patrick está cubierto de libros. El fondo de pantalla de su ordenador muestra un reloj de cuenta atrás para su vida: Tiene 52 años y faltan algunos días.
“Esta es una estimación muy aproximada, pero un recordatorio de que la gente envejece muy rápidamente”, explica.
Hace tres años, Stripe tenía 80 empleados. Ahora tiene 1300. La compañía continúa tratando de cultivar su reputación entre los desarrolladores.
El plan de los Collisons es agrupar nuevas herramientas en el producto principal para hacer que la tarifa de 2,9% parezca siempre más razonable.
Una de estas características es Radar, que permite detectar el fraude y aunque es gratis, ciertos complementos como el soporte al cliente tienen un cobro aparte.
En julio de 2018, Stripe lanzó una plataforma que permite a compañías para emitir tarjetas de crédito del Visa y Mastercard, disponibles en beta privada.
Artículo original en inglés publicado en Bloomberg. Síguelos en Facebook, Twitter.