Echemos un vistazo a la vida de Alexandra Andresen, la multimillonaria más joven del mundo.
En el reporte de la revista Forbes del año pasado, se confirmó que la persona más joven del planeta en tener una cuenta multimillonaria es la heredera noruega, con un colosal patrimonio neto estimado en $1,4 mil millones (€1.199 millones).
En el 2007 su padre, Johan H. Andresen, le transfirió el 42% de las acciones de Ferd, la centenaria compañía familiar de inversión.
También le traspasó el otro 42% de las acciones a la hermana de Alexandra, Katharina Andresen, quien con 22 años es la segunda persona más joven con más dinero en el planeta, también con un patrimonio de $1,4 mil millones.
Este año las hermanas aparecieron en la lista de Forbes por primera vez, ya que ambas superan los 17 años y, según las leyes noruegas, ya están obligadas a declarar impuestos y por eso la fortuna se hizo pública.
A pesar de su vida llena de privilegios en una de las familias más conocidas de Noruega, Alexandra no lleva un estilo de vida típico de una niña rica. Es jinete de equitación y ha ganado varios concursos.
Sus padres le enseñaron a ser humilde y a ahorrar siempre que sea posible.
Así que a pesar de tener más de $1.400 millones en el banco, siempre ha sido ahorrativa. Incluso ha comprado coches de segunda mano.
Alexandra Andresen nació en 1997 en Oslo, Noruega.
Su padre es el empresario Johan H. Andresen.
La familia Andresen hizo dinero con la marca de tabaco Tiedemanns, que hasta el 2005 perteneció a la firma Ferd. La compañía también invierte en la bolsa de valores nórdica.
Ella también fue criada por su madre Kristin. Aquí ves a la madre cuando estaba joven.
Su hermana Katharina, quien es un año mayor, es la segunda persona más joven con más dinero en el mundo.
En su casa tiene un potrero con caballos y otros animales.
Tiene varios perros.
Así que fue natural como surgió su afinidad con los animales.
Sus perros la siguen mientras ella pasea a caballo.
Su padre vendió la compañía de tabacos a Skandinavisk Tobakskompagni por una cifra alrededor de $500 millones (€430 millones).
Cuando su padre le transfirió el 42% de acciones de la empresa, Alexandra tenía apenas 10 años.
Pero el padre aún controla la compañía.
Alexandra comenzó a practicar la equitación a muy temprana edad. Con los años se convirtió en profesional.
Ha recibido muchos premios por sus habilidades sobre el caballo.
Ella está patrocinada por Kingsland, una marca de equitación.
Aunque Alexandra y Katharina han recibido una enorme fortuna por la herencia de Ferd, su padre ha dicho que no tienen la obligación de dirigir la empresa en el futuro.
Katharina estudia ciencias sociales en Amsterdam.
Alexandra todavía no está segura sobre lo que hará en el futuro. Esto lo dijo en una entrevista que salió publicada en la página web de Ferd: “Siento que es una gran responsabilidad. Recibí algo que no merezco. Pero quiero ayudar a desarrollar a Ferd y devolver algo de lo que me ha dado, aunque es difícil”.
“El hecho de que mi familia tenga muchos recursos me ha ayudado durante toda mi vida. Sobre todo para montar caballos, una disciplina que requiere de mucho dinero. Pero tener dinero no es suficiente para tener éxito”.
En una entrevista con la revista Eurodressage dijo que quiere montar caballos durante toda su vida.
A pesar de haber crecido en la abundancia, sus padres siempre le enseñaron a ser responsable con el dinero.
Alexandra no es una chica amante de las excentricidades ni opulencias.
Solo disfruta de vacaciones de vez en cuando.
Invita a sus amigas a los eventos de alfombra roja.
Es muy cercana con su madre.
Su novio es Joachim Tollefsen, noruego de 25 años, luchador profesional de artes marciales mixtas.
Pero lo que más ama son los caballos, lo que comparte con sus más de 75.000 seguidores en su cuenta de Instagram.