Los multimillonarios y las celebridades de talla mundial se acostumbraron a disfrutar lo mejor de la vida, y por esa razón son personas sumamente exigentes cuando compran un jet privado, una mansión y, sobre todo, un mega yate. Siempre hay alguien dispuesto a hacer sus sueños realidad a cambio de mucho dinero.
"Nada es imposible". Es la respuesta del diseñador de interiores de yates Cristiano Gatto cuando un mega rico le hace saber lo que quiere en su nuevo barco privado.
Gatto recuerda cuando trabajó en la decoración del mega yate Crazy Me de Heesen, que tiene unas medidas de 164 pies (50 metros).
El propietario que había encargado este yate quería que cada escalera se iluminara como una lámpara. Gatto sabía que era un enorme reto lograrlo, e incluso tuvo varias discusiones con el astillero al respecto. Finalmente, el capricho del cliente fue cumplido.
"Los propietarios de yates privados están acostumbrados a un excelente servicio, por eso son muy exigentes", comenta Pascale Reymond de Reymond Langton Design.
Eso quiere decir que siempre debes cumplir con las exigencias de los propietarios, ya sea que quieran una habitación donde caiga nieve, un mini submarino que combine con su barco o un garaje subactuático para almacenar su Ferrari. No existe un "no" como respuesta.
Son ese tipo de desafíos los que motivan al galardonado estudio de diseño Bannenberg & Rowell.
"Para ser diseñador de yates privados debes tener una serie de cualidades: debes ser diplomático para conversar con los clientes y tener algo de psicólogo para entender sus personalidades", indica Jon Bannenberg, encargado de la empresa.
"Para elaborar el diseño de un yate debes conocer mucho sobre el cliente. Desde el lugar de la cama en el que duerme hasta cómo le gusta doblar sus camisas. Sin embargo, también hay momentos en los que debes saber cuando un proyecto se escapa de tus manos para no decepcionar al cliente".
Los diseñadores de yates se preocupan por lograr el barco perfecto exactamente con las exigencias del dueño y también de cumplir los plazos de entrega.
"Es algo muy serio. Debes ser muy perfeccionista, metódico y disciplinado. Es más fácil diseñar una casa que un yate. Los barcos tienen techos bajos y las habitaciones no son tan grandes. Debes estar atento de cada detalle. Todo debe ser perfecto", acota Reymond.
Los mejores diseñadores de yates privados en la actualidad se encuentran en Gran Bretaña, aunque los clientes provienen de todo el mundo. En los años 60 y 70 la mayoría de los clientes de yates eran multimillonarios griegos y del Medio Oriente.
Pero actualmente quienes más adquieren mega yates en el mundo son los oligarcas rusos y los magnates estadounidenses de la tecnología.
Los rusos adoran los yates, en especial los de colosal tamaño. "Antes de que se disparara la economía rusa, eran considerados yates grandes aquellos que medían entre 164 y 196 pies (50 y 60 metros) de largo. Pero los rusos pronto comenzaron a pedir yates de 262 pies (80 metros) y hasta 328 pies (100 metros)", indica Reymond.
Los multimillonarios de Silicon Valley también han invadido el mercado de los mega yates en los últimos años. Entonces, ¿la diversidad de nacionalidades afecta el diseño de los yates?
"No podemos generalizar por nacionalidades", advierte Reymond. "Algunas personas son muy clásicas, y otras contemporáneas". Sin embargo, existen marcadas diferencias entre las exigencias de los ricos jóvenes de Estados Unidos a las peticiones de un multimillonario mayor de Arabia Saudita.
Dickie Bannenberg, padre de Jon Bannenberg, construyó el yate Rising Sun de 433 pies (130 metros) para el fundador de Oracle Larry Ellison, en el cenit del boom estadounidense de las telecomunicaciones, que luego se fusionó con el auge del Internet.
"Estas personas (líderes de la tecnología) pertenecen a un mercado más joven y sofisticado, y tienen una apreciación más aguda para el diseño", afirma Dickie.
Los clientes más jóvenes tienen preferencias por un barco mejor iluminado y espacioso.
"También hay un mayor deseo por la conexión con el mar con beach clubs, plataformas para lanzarse al agua, etc", comenta Dickie, quien acota: "Anteriormente era común construir comedores formales en el interior del barco, pero ahora el 95% de los clientes prefieren comer al aire libre".
Uno de los yates privados más increíbles que se han presentado en los últimos años es el Galactica Super Nova, un barco de tres pisos que se dio a conocer en el Monaco Yacht Show.
Tiene una piscina con borde infinito con fondo de cristal y su propia cascada. La luz natural invade todo el beach club, con un espacio muy amplio para una experiencia de total relax.
El yate de Steve Jobs llamado Venus -que Jobs no pudo ver ya que falleció antes de que se completara su construcción- fue diseñado por Ubik, la compañía de Philippe Starck.
Este barco hace un uso muy radical de la estructura de vidrio. De hecho, fue diseñado por algunas personas que trabajaron en las tiendas Apple que tienen paredes acristaladas. Es un yate muy elegante con detalles súper lujosos. Sin embargo, también es un barco muy moderno sin ostentar los chapados en oro del pasado.
La tendencia en la actualidad se enfoca más hacia la amplitud y la practicidad de la embarcación, antes que en su ostentosidad.
El mega yate "Venus" que mandó a construir Steve Jobs.
En el 2013, Beyoncé y Jay Z fueron vistos en el Mediterráneo a bordo del Galactica Star, un yate de tres pisos de 213 pies (65 metros) que diseñó Dickie para Heesen.
El alquiler de este súper yate costó la enorme suma de $350.000 (€299.000) sin contar combustible, alimentos, una botella de champán de 15 litros Armand de Brignac, entre otros servicios de total lujo.
Asegura Dickie que este barco siempre ha tenido un "extraño y magnético encanto", con un estilo contemporáneo y elegante. "Tiene juguetes de alta gama como lanchas, motos de agua, un minisubmarino e incluso un helicóptero".
Reymond nos recuerda una de las peticiones más extrañas que recibió de un cliente. Un propietario quería que en el barco hubiese una habitación donde nevara con nieve real. La exigencia fue cumplida. Dice Reymond que resultaba una experiencia subrealista una habitación con nieve cuando afuera había un sol resplandeciente y las chicas en bikini.
Son este tipo de retos los que le aportan magia a la industria del diseño de yates privados.
"Estás diseñando algo hermoso que se mueve por todo el mundo. No importa en el lugar que te encuentres, siempre te despertarás en la misma habitación de lujo", acota Reymond.
Todos los muebles y adornos de los yates privados están fijados al suelo, para que no se muevan con la marea.
Sin embargo, algunos diseñadores han cometido el error de no ajustar muy bien algunas estructuras, y por eso se han escuchado historias de pianos de cola que se deslizan por una habitación destrozando todo a su paso. Los diseñadores deben tener eso en cuenta.
Para no afectar el rendimiento del yate, todos los muebles deben estar elaborados con materiales livianos. Las piezas de mármol se cortan de apenas 3mm.
Reymond también se refirió al meticuloso trabajo que debe realizar la tripulación en un yate de lujo.
"El servicio debe estar equiparado al de un hotel cinco estrellas, y a la vez la tripulación debe intentar ser invisible para no molestar a los clientes", comenta Reymond. "La tripulación de estos yates tienen una gran preparación, y por eso se les paga muy bien, comen alimentos exquisitos y viajan por todo el mundo".
Es impresionante ver todo lo que hay detrás del diseño de un mega yate. Ahora entendemos mucho mejor los descomunales precios de estas embarcaciones, solo al alcance de ricos y famosos.
[ Fuente Daily Mail ]