El mundo sigue consternado por la muerte del cantante Prince. El ícono de la música falleció hace dos años a sus 57 años y ahora todos se preguntan quién se quedará con su fortuna que sobrepasa los $300 millones (€257 millones). De momento la familia del cantante le ha pedido al gobierno que intervenga, ya que no existe un testamento.
El galardonado cantante fue encontrado muerto en su mansión Paisley Park, en Minnesota, con restos de analgésicos en la sangre.
Tyka Nelson, hermana del cantante, ha introducido documentos legales con la intención de ser designada como la heredera de la riqueza que en este momento se encuentra en un limbo.
La ley de herencia de Minnesota indica que si un residente muere sin testamento, como es el caso de Prince, su riqueza pasará al control de sus familiares más cercanos. Los cónyuges y los niños son los primeros a tomar en consideración. Luego siguen los nietos, padres y hermanos.
Tyka es la única hermana de sangre de Prince y por lo tanto su pariente más cercano. Los padres de ambos fallecieron entre el 2001 y 2002.
Prince no estuvo casado desde el 2006 y su único heredero, Boy Gregory, falleció en el año 1996 solo siete días después de su nacimiento.
Nelson también pretende que la fortuna sea dividida entre sus medios hermanos, productos de otros matrimonios de sus padres. Esto deja claro que no la mueve una ambición egoísta, ya que desea repartir la herencia.
De momento Bremer Bank será el administrador temporal de los activos de Prince. Pero solo lo hará por seis meses. Luego el caso se disputará en los tribunales.
Sin embargo, todavía es posible que surjan nuevas informaciones sobre el destino de la riqueza del cantante. Se sabe que Prince era practicante de la religión Testigos de Jehová, así que podría haber legado algo a la iglesia.
Otro de los problemas que podrían enfrentar los herederos de Prince serían las deudas que dejó el cantante en materia de impuestos, con un pago pendiente que podría alcanzar la cifra de $5,45 millones (€4,67 millones).
Muchos se preguntan por qué una figura tan prominente y con tanto dinero como Prince no tomó la precaución de dejar un testamento. Fuentes cercanas comentan que el artista siempre mostró desconfianza hacia los documentos legales y contratos.
Los activos de Prince incluyen su enorme mansión en Minnesota con su estudio de música, una espectacular villa en Marbella, un ultra lujoso escondite de Prince en las Islas Turcas y Caicos, su marca, los derechos de sus canciones y más.