El 5 de junio del 2009 "The Hangover" debutó en la pantalla grande. Esa película se convertiría en la más taquillera de todos los tiempos de clasificación R, con $467 millones (€382 millones) de ganancias en todo el mundo. Las siguientes dos películas de la saga súper exitosa se combinaron para enormes ingresos totales de $360 millones (€295 millones).
Tal vez sea difícil de creer, pero en algún momento todos los involucrados en la película pensaron que el film sería un enorme fracaso. Tomemos en cuenta que antes del 2009 los cuatro protagonistas eran casi desconocidos hasta el momento. La única persona que siempre creyó en el proyecto era el director y productor ejecutivo Todd Phillips.
Había tantas dudas sobre la película, que en algún momento sopesaron la idea de cancelar el proyecto. Pero Phillips creía tanto en el film, que aceptó la confiscación de su salario a cambio de un porcentaje en las ganancias netas. Una gran decisión.
Me encanta la historia de Todd Phillips, ya que encarna la convicción de un hombre cuando está dispuesto a apostarlo todo por aquello en lo que cree.
El súper éxito que nadie quería
En el 2007 un guión llamado "What Happens in Vegas" estuvo circulando en Hollywood. Varios estudios rechazaron el guión de inmediato. Sin embargo, los guionistas no se rindieron y le hicieron llegar el proyecto al director Phillips, que ya había dirigido comedias como Old School, Road Trip y Starsky & Hutch. Phillips convenció a Warner Brothers para dar luz verde a una película titulada "The Hangover" con un presupuesto de $35 millones (€28,6 millones).
La casa productora estadounidense, Warner Bros. Entertainment Inc., fue firme desde el principio al asegurar que si la película sería clasificada R necesitaba actores reconocidos. El estudio contactó a Jake Gyllenhaal y Jonah Hill pero ninguno estaba disponible.
Entonces Phillips se atrevió con un grupo de actores que hasta entonces eran prácticamente desconocidos: Bradley Cooper, Zach Galifianakis, Ed Helms y Justin Bartha. El lado positivo para el estudio era que los cuatro actores ganaban de manera combinada menos de $1 millón.
Ejecutivos de Warner Brother se mostraron extremadamente reacios a atreverse a apoyar una película clasificación R de $35 millones con estos actores desconocidos. Pero Phillips le hizo una oferta al estudio que no podían rechazar. El director decidió renunciar a su sueldo de $6,5 millones de dólares (€5,3 millones) a cambio del 16% de los ingresos brutos de la película. Así fue como el proyecto salió adelante.
Como todos sabemos ahora, The Hangover fue un éxito mundial. La comedia que nadie quería terminó recaudando $470 millones en todo el mundo. Este divertido film destronó a Beverly Hills Cop como la comedia de clasificación R más taquillera de todos los tiempos. Cuando se toman en cuenta las ventas de DVD's, Phillips recibió $75 millones (€61 millones) con la primera entrega de Hangover (menos impuestos).
Pero hay más. Debido a que Phillips ni los cuatro actores principales tenían contratos firmados para filmar las secuelas, se vieron en una posición privilegiada para las películas 2 y 3. Para el segundo film de Hangover, los cuatro actores recibieron un salario base de $5 millones (€4,09 millones) más el 4% de los ingresos brutos de la película. Todd Phillips negoció un salario de $10 millones (€8,17 millones) y el 10% de los ingresos netos.
Cuando el segundo Hangover recaudó $586 millones (€480 millones), cada actor se llevó a casa la cantidad de $28,44 millones (€23,2 millones), y Phillips ganó $68 millones (€55,6 millones). Los cinco lograron un mejor contrato para la tercera película, que recogió $360 millones a nivel global.
En total, Todd Phillips hizo al menos $150 millones (€122,6 millones) con la franquicia The Hangover. Mucho mejor que los $6.5 millones de salario que rechazó para apostar en grande por aquello en lo que creía.
¿Cuál es la lección aquí? Si crees realmente en algo, no dudes en apostarlo todo. También podrías ganar una fortuna.