Muhammad Ali partió de este mundo y con él se fue una parte importante de la historia del boxeo y del deporte en general. Algunos consideran que se trató del estadounidense más famoso del siglo 20. Después de todo, quién no conocía a Cassius Clay, el nombre de pila del mítico peleador.
Como puedes imaginar Ali ganó mucho dinero sobre el cuadrilátero siendo el mejor boxeador de todos los tiempos. También llenó su cuenta bancaria con acuerdos de patrocinio, otros premios que le dejó el boxeo y algunas inversiones.
Ali ganó millones de dólares en su carrera como boxeador. No al nivel de Floyd Mayweather ya que la economía del deporte era muy diferente en los años 60’ y 70’.
Muhammad Ali no fue el primer boxeador en ganar $1 millón por una pelea. Ese honor le pertenece a Gene Tunney en 1927 por su revancha contra Jack Dempsey. Pero Ali ganó una jugosa cantidad de $2,5 millones (€2,04 millones) por su recordado combate contra Joe Frazier en 1971. Eso es el equivalente a 15 millones de dólares (€12,2 millones) en la actualidad.
Luego obtuvo una cantidad de $5,45 millones (€4,45 millones) por su lucha contra George Foreman en 1974, lo que hoy en día representaría $26 millones (€21,2 millones).
El cheque más gordo de su carrera lo recibió en 1980 cuando se llevó a casa la enorme cantidad de $7,9 millones (€6,45 millones) por pelear contra Larry Holmes.
Curiosamente cuando esa cifra se ajusta a la inflación de 1980 sería un equivalente a $22 millones (€17,9 millones), lo que convierte a los $5,45 millones que cobró en 1974 en el más grande premio de su carrera.
Campeón derrochador
Desafortunadamente Ali derrochó muchos millones de dólares en su trayectoria por una combinación de mala gestión y malos hábitos de gastos. Ya vemos que la tendencia de despilfarro de dinero en los boxeadores también afectó al más grande de todos los tiempos.
En una época Muhammad Ali estaba pagando $64.000 (€52.325) a sus varias familias con distintas mujeres. A mediados de la década de los 80’ se comentó que Ali estuvo cerca de la banca rota.
Ali le dio a un amigo $40.000 (€32.705) para establecer una empresa de gestión deportiva. Años más tarde ese amigo fue detenido por haberle robado al campeón una cifra de $21 millones (€17,1 millones).
Luego los representantes de Ali le ayudaron a volver a ganar dinero a través de la publicidad. El boxeador creó una corporación llamada GOAT LLC ("Greatest Of All Time"). Su mayor ganancia fue cuando vendió el 80% de la compañía por $50 millones (€40,8 millones).
El nombre de Ali genera cantidad de dinero por sí solo. Anualmente la familia del fallecido campeón gana entre $5 y $7 millones (€4 y €5,7 millones) por la marca Ali. Se calcula que para el momento de su muerte el pegador tenía un patrimonio neto de $50 millones.
A Muhammad Ali le sobreviven su esposa desde hace 30 años Lonnie Ali y nueve hijos.
Aquí puedes revivir el inesperado KO que le propinó Ali a George Foreman en 1974: