Conocido como el mega yate más grande del mundo por su tonelaje bruto y más caro del mundo, Dilbar –de 156 metros (512 pies) de eslora– ha redefinido la noción de espacio en la navegación.
La tercera embarcación con el mismo nombre, fue entregado por astillero alemán Lürssen a su propietario, un magnate ruso, en 2017.
El primer mega yate Dilbar entregado a Alisher Usmanov — un inversor multimillonario cuyo patrimonio neto según Forbes es $16 mil millones (13 millones de euros) — tenía 66 metros de eslora y fue lanzado por Oceanco en enero de 2005.
Para el astillero holandés, el primer Dilbar fue un avance significativo gracias a sus características innovadoras como piscina, spa de 5 metros de ancho en su terraza y su Beach Club.
Con un interior diseñado por Alberto Pinto, Dilbar se convirtió en uno de los mega yates más solicitados en la mar.
Su popa redondeada, así como su impresionante volumen interior de 1.801GT lo hizo destacar entre la multitud. Dentro, las comodidades incluyen un cine privado, amplias cabañas en la cubierta principal, un gran comedor y un salón con piano.
Poco antes de la entrega del segundo Dilbar, Usmanov cambió el nombre del primer mega yate a “ONA” y posteriormente lo puso en el mercado de corretaje.
El yate fue vendido en 2010 al magnate petrolero de los Estados Unidos William Kallop, por un precio de $59,9 millones (€48,7 millones).
En el 2008, el primer Dilbar era el 17º barco más grande del mundo y uno de los primeros en disponer de filtros de partículas en los escapes del motor para reducir sus emisiones de CO2.
Conocido durante toda su construcción como “Proyecto Opal”, el gigantesco mega yate presentaba algunas similitudes en el diseño interior y las comodidades con el primer Dilbar.
Además, también incluía un gran jacuzzi, una fuente en la terraza, un salón con un bar y un gran piano, además de un cine privado.
La escala del nuevo mega yate, sin embargo, permitió algunas características nuevas y mejoradas, como una oficina inmensa para el propietario, con varias áreas de reunión y un área de descanso con salida hacia la cubierta superior de popa.
También se construyó una sala de conferencias ejecutiva con una vista inmejorable hacia el mar, un gimnasio y un área completa con spa + Wellness.
Después de varios años en los primeros lugares de la lista de los yates más grandes del mundo, el nombre Dilbar saltó a la fama con la entrega del nuevo (y por ahora más increíble) mounstruo de 156 metros, que se ha convertido en el buque insignia de la flota del magnate.
Con un diseño exterior de Espen Oeino, Dilbar ahora tiene un peso bruto de 15.917 toneladas, por lo tanto, supera las 15.850 toneladas de los mega yates “Al Said” y las 13.136 toneladas de “Azzam”. Notablemente, estos tres voluminosos yates fueron construidos por Lürssen, que ha visto fortificada su posición como principal destino para la construcción de mega yates.
Los datos más impresionantes del nuevo buque insignia de Dilbar incluyen su manga de 23 metros y su calado profundo de 6 metros. Según el astillero, se construyeron 3.800 metros cuadrados de espacio habitable.
Construido en menos de 52 meses desde la firma del contrato hasta la entrega, Dilbar fue también el yate más grande que alguna vez haya tenido una planta eléctrica de diesel desde el punto de vista de la ingeniería. Esto permite que el yate de 156 metros alcance una velocidad crucero de 22,5 nudos.
Desde su entrega en 2017, Dilbar ha llamado la atención de la prensa mundial y de los usuarios de las redes sociales de todo el mundo. Sus viajes por todo el Mediterráneo han sido documentados por entusiastas de todo el planeta con fotos y videos tomados desde casi todos los ángulos posibles.
A principios del año pasado, se informó que había sido vendido una embarcación de 160 metros, la más grande del mundo, en OneOcean Port Vell, Barcelona.
Aunque el nombre del titular del contrato de arrendamiento a largo plazo no fue revelado, Dilbar es estadísticamente el único mega yate que pudo haber utilizado el atracadero en todo su potencial, lo que de hecho ha ocurrido durante la temporada baja.
Totalmente renovado en 2014 gracias a una inversión de 100 millones de euros ($122,8 millones) liderada por el Grupo Salamanca con sede en el Reino Unido, OneOcean Port Vell se ha convertido en un destino de grandes mega yates.
En 2017, informaron un aumento del 742% en las visitas de yates de más de 100 metros de largo. Ese mismo año, la marina fue adquirida por el banco de inversores de Qatar, QInvest, junto con un fondo de inversión propiedad del multimillonario ruso Vagit Alekperov.
Alisher Usmanov, el decimo hombre más rico de Rusia, también fue presentado como una de las personas más poderosas del mundo en 2016.
Es principalmente conocido en la navegación a vela gracias a la flota de Dilbar, pero aun más famoso por ser el principal accionista de USM Holdings.
Las participaciones de USM provienen principalmente de los sectores metalúrgico e industrial. Sin embargo, con el tiempo se han diversificado y ahora también incluyen la propiedad de Megafon, uno de los operadores de telecomunicaciones más grandes de Rusia. Para el Reino Unido, Usmanov es mejor conocido como uno de los copropietarios del club de futbol Arsenal.
Para la comunidad tecnológica, Usmanov es uno de los inversores más exitosos de la historia moderna, ya que ha realizado inversiones en empresas como Facebook, Alibaba y Mail.ru.
Artículo original en inglés publicado en Yacht Harbour. Síguelos en Facebook, Twitter.