El estadounidense Stan Kroenke es el accionista mayoritario del equipo de futbol británico Arsenal con el 67% de las participaciones; mientras que el ruso Alisher Usmanov es el según mayor accionista con 30,4%.
Usmanov ha intentado varias veces hacerse con la mayor parte, por lo que Kroenke, para acabar con cualquier intento de arrebato del control del club, le ha ofrecido $37.000 (31.747 euros) por cada acción, que se traducen en casi $695 millones (591 millones de euros).
Para el equipo, tener dos inversores principales que no se relacionan de ninguna manera, a pesar de que forman parte del club desde hace 10 años, no es algo saludable.
Usmanov nunca ha podido influir en alguna decisión y ambos saben que esto continuará de la misma manera por mucho más tiempo a pesar de que han tratado de forzar un cambio.
Si Kroenke tiene éxito en su intento de comprar a Usmanov, llevaría su porcentaje de acciones al 97%. El resto pertenece a accionistas minoritarios, muchos de los cuales han conservado su participación durante décadas, incluso pasando por generaciones.
La situación pondría a Kroenke en una posición privilegiada para asfixiar a los accionistas minoritarios y esto supone un riesgo por el hecho de que el Arsenal se convierta en un negocio privado.
Esto es algo muy preocupante para el club de 103 años, además de eliminar cualquier requisito para la publicación de cuentas, se abriría la opción de registrar el negocio en los Estados Unidos bajo el paraguas de Kroenke KSE en Delaware.
Tampoco habría barreras internas para usar al Arsenal como palanca en los acuerdos, como hizo la familia Glazer con el Manchester United.
Estas maniobras han sido observadas con interés por un consorcio de antiguos partidarios del Arsenal, que obtuvieron respaldo financiero y trataron de lanzar el sombrero sobre el ring tres veces durante el año pasado, pero el empresario nacido en Missouri rechazó cualquier ofrecimiento.
Un portavoz del consorcio que ha estado en comunicación con Kroenke y Usmanov durante un año aproximadamente, expresó su preocupación por la situación.
“Estamos poseídos en un 97% por dos individuos muy ricos y es una decepción que nunca hayan conseguido reunirse y mover las piezas para que el club avance. El Arsenal no ha podido sacar provecho de la riqueza y experiencia de ambos”.
La oferta del consorcio para intentar hacer una oferta y levantar al club sigue sobre la mesa.
“Tenemos un interés absoluto”, dijo el portavoz. “Somos un grupo de gente con negocios locales que hemos tenido una larga relación con el Arsenal. Nos reunimos por primera vez hace tres años con el objetivo de desalojar el callejón sin salida en el que se encuentra actualmente el equipo. Queríamos encontrar una alternativa y tenemos tres años buscando respaldo. Hemos salido a buscar el dinero para que el sr. Kroenke y el sr. Usmanov ganen millones y consigamos que el club vuelva a la cima”.
“Si Kroenke llegara al 97% de las acciones, obligaría al Arsenal a convertirse en una empresa completamente privada. Eso sería una gran preocupación para todos los involucrados en el club y la transparencia sería casi nula”.
Ashley Brown, directora ejecutiva de Supporters Direct, ve esto como parte de una tendencia preocupante.
“Está claro que demasiados club están yendo hacia una dirección similar, alejándose de los aficionados y siendo tratados como negocios. Los mejores dueños reconocen que son custodios de un club de futbol amado por miles y que está en el corazón de las comunidades”.