Un diamante ultra-raro de 342 quilates, llamado Reina de Kalahari (en inglés: The Queen of Kalahari), se ha transformado recientemente en el más precioso set de joyería jamás producido por Chopard.
El color perfecto y la pureza absoluta de esta excepcional gema es la razón por la que fueron creados 21 diamantes igualmente impresionantes, 5 de ellos por encima de los 20 quilates.
La Reina de Kalahari, que combina color D con grado F de claridad, fue descubierto hace dos años en el corazón de la mina de Karowe, en Botswana, y ahora, los brillantes diseñadores de Chopard la han transformado en El Jardín de Kalahari, la más opulenta y escandalosa colección de joyas de todos los tiempos.
Las piezas de El Jardín de Kalahari, incluyen una extraordinaria colección de seis modelos de prendas, que representan casi un año completo de trabajo en manos de los artesanos y creadores de la joyería Chopard.
La co-presidenta de la maison, Caroline Scheufele, ha supervisado personalmente cada etapa por razones obvias, y el resultado final ha sido simplemente impresionante.
Esta magnífica colección de joyas consta de un deslumbrante collar, que incluye un mecanismo totalmente invisible que permite al usuario adornarla con una exquisita flor.
Además, la colección también cuenta con un maravilloso brazalete adornado con dos diamantes de corte esmeralda y dos espectaculares anillos, de los cuales uno de ellos lleva el diamante de 20 quilates.