Por definición los nuevos ricos son aquellos a personas que han conseguido amasar una considerable o cuantiosa fortuna durante su vida, bien sea por herencias, trabajo y esfuerzos, o por haber sido el afortunado en que su boleto de lotería sea el ganador.
Este ascenso en la escala social puede ser de forma progresiva o de una sola tacada. Dinero, joyas y mucho lujo es lo que les depara a estos nuevos ricos por consiguiente, pero lo que sienten predilección es por un elemento muy cotizado, según se mire: los coches, pero no un simple turismo, sino coches de alta gama.
La fama les precede, se conoce que el estereotipo de nuevos ricos se gasta todo lo que tienen en unos buenos bugas, de todo tipo de marcas y modelos, a cuál más lujoso y con más prestaciones. Pero no todos disponen en una misma tacada el dinero suficiente para disponer de todos sus diseños automovilísticos preferidos…
Como bien hemos mencionado antes, los nuevos ricos no se convierten en millonarios, así de golpe y sopetón, sino también puede ser de forma progresiva con su trabajo y esfuerzo.
Estos psuedoricos no podían permitirse en sus inicios un buen carro, pero no negaban su pasión por un buen coche, es por eso que optaban por empresas de alquiler de cochazos.
Estos eran muy populares entre ellos, puesto que no querían renunciar a esos lujos tan suculentos. DD sport car es una opción entre los coches de lujo, que se encontraba en toda la península y que ofrecían cualquier tipo de coches de alta gama a un precio muy razonable.
No obstante, no a todos los pseudoricos les hacía gracia eso de conducir un mismo maserati que un hombre de a pie, y se esforzaban para llegar a esa amasadora fortuna que les permitiera tener uno cada día de la semana.
Los nuevos ricos pues, son persona con dinero, pero no de cuna, que no saben en qué invertir o qué hacer con tantos billetes, pero que realmente si que saben lo que les gusta: Los cochazos de alta gama como Ferraris o Aston Martins para fardar y no parar de disfrutar.
Porque ¿A quién le amarga un dulce?