Tesla Motors presentó la semana pasada dos nuevas versiones con un precio más bajo de su coche eléctrico “Model S”, que podrían llegar a las carreteras estadounidenses en julio.
Las 2 nuevas versiones tendrán baterías más pequeñas y necesitarían ser cargados más a menudo.
Antes los incentivos fiscales, los modelos actuales: Sedán Model S y el Model S se venden en los Estados Unidos por $66.000 y $76.000 (€58.500 - €67.000) respectivamente, pero pueden llegar hasta los $100.000 (€88.500) con actualizaciones y otros cargos, de acuerdo a Time.
Los nuevos modelos: el ’Model S 60’ —de tracción trasera— se venderá por $66.000 y el ‘Model S 60D’ —de tracción en las cuatro ruedas— se venderá por $71.000 (€62.800) en el mercado estadounidense.
Los dos modelos contarían con un alcance —antes de ser cargado— de 322 kilómetros (200 millas), de acuerdo a un comunicado de Tesla. Tendrán una velocidad máxima de 209 km/h (130 mph).
El 60 y el 60D vendrán con un paquete de batería que utiliza 60 kWh de las 75 kWh en su capacidad total, dándoles 218 y 210 millas de alcance respectivamente.
Sin embargo, para usar los 75 kilovatios/horas, los dueños tendrían que comprar una actualización del software para el vehículo.
Tesla tiene como objetivo producir entre 80.000 y 90.000 coches para finales del 2016, pero los niveles de producción del primer trimestre sugieren que la compañía podría no estar en camino a cumplir los objetivos establecidos.
El Modelo 3, el coche más asequible de Tesla hasta ahora, se venderá por $35.000 (€30.900), antes de reembolsos del gobierno e incentivos fiscales, y tendrá un alcance completamente eléctrico de más de 200 millas.
En el mes de abril, la compañía recibió más de 350.000 aplicaciones con depósitos de $1.000 (€885) para el nuevo coche, el cual se dice comenzaría a fabricarse pronto en su fábrica de Fremont, California y empezarán las entregas a finales del 2017.
Fuente: Mashable