Cada año se gastan millones en dietas y membresías de gimnasios, los especialistas de obesidad cada vez creen que el problema no radica en lo que comemos o la cantidad de ejercicio que hacemos, sino en nuestra forma de pensar.
"Existe una comunicación sin escala entre su cuerpo y la mente, pero la mente es más importante porque conduce a tus comportamientos", dice la especialista en nutrición y ejercicio Janet Thomson, autora del libro: Think More, Eat Less: Use Your Mind to Change Your Body.
Ella está convencida de que sufrir de sobrepeso es el resultado de mensajes confusos desde el cerebro saboteando nuestros intentos de adelgazar.
Así que, si nos han dicho que son "bien formado" o "gordito" o que "la dieta es una pérdida de tiempo", los mensajes se pueden pegar. Sin darse cuenta, nuestro vínculo emocional con la comida puede llegar a ser tóxico y ya no podremos comer sólo cuando se tiene hambre y dejar de comer cuando estás lleno.
Sin embargo, la especialista sostiene que esto puede ser cambiado y ha elaborado un programa de ejercicios mentales que ella cree que puede aumentar nuestras posibilidades de conseguir mantenerse delgados:
PIENSE de cómo usted lucirá y se sentirá un mes después de que haya logrado su objetivo de pérdida de peso - delgado y saludable. Ahora, visualícese tres meses y seis meses más tarde siendo delgada. Comprométase a pasar un minuto antes de irse a dormir cada noche y un minuto cuando se despierta todas las mañanas (mientras usted está en un sueño, estado de trance) visualizándote delgada. La creación de poderosas emociones positivas ayuda a generar confianza en su habilidad para tener éxitos.
ESCRIBA exactamente lo que desea lograr - estar cómodo utilizando una talla 12 en pantalones vaqueros? Correr una maratón? - y lo que usted está dispuesto a hacer para lograrlo - "Voy a comer menos" o "me limitaré a un régimen de entrenamiento". Lea esta declaración de objetivos en voz alta dos veces al día.
IDENTIFIQUE los pensamientos y comportamientos que le puede haber impedido alcanzar sus metas en el pasado. Haga una lista de todas las cosas que podrían haber estado haciendo a usted engordar (ej: demasiadas comida para llevar, mucho vino, etc), a continuación, escriba una lista de comportamientos alternativos que tiene la intención de hacer en su lugar (ej: la planificación de las comidas, beber alcohol sólo los fines de semana, etc).
MANTENGA un diario de alimentos: escribir todo lo que pasa por su boca. Los estudios muestran que incluso si conscientemente no restringimos su ingesta de alimentos, un diario te hace más conciencia de lo que comes. Ser consciente constituye un paso adelante.
PASAR TIEMPO con personas de mentalidad similar a la suya, que ya lo han logrado o que tienen objetivos similares. ¿Con quién usted pasa tiempo, puede cambiar su actitud directamente porque su subconsciente estará continuamente procesando y compartiendo experiencias como si fuera la suyo propio.
SEGUIR dos reglas simples de la alimentación: Nunca use la comida como recompensas o para sentirse bien - coma sólo porque su cuerpo necesita el combustible, y luego dale la mejor calidad posible del combustible. Nunca se prohibirán de comer algo, esto solamente hará que lo quiere más.